Si bien la Cruz estuvo hace escasas fechas en el Convento de San Esteban, de los Padres Dominicos, la festividad de Nuestra Señora del Rosario, patrona de la Orden de Predicadores, bien merecía su regreso al monasterio. Así lo solicitó la Archicofradía de Madre de Dios del Rosario que fomenta su culto en Salamanca, una antigua corporación recientemente reorganizada con nuevo vigor. La Cruz volvió a San Esteban para la culminación de la novena y la función solemne del 7 de octubre. Tras la Eucaristía la imagen de la Virgen del Rosario fue llevada en procesión claustral, y en el cortejo figuró la Cruz de la Asamblea.
Durante las jornadas posteriores la Cruz ha continuado en San Esteban, por lo que también estuvo presente en la tradicional fiesta de la Virgen del Pilar que allí celebra la Guardia Civil cada 12 de octubre.
Fotografías de Semana Santa Salamanca y de la propia Archicofradía.
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